Un estudio publicado por investigadores de la
Universidad de Valencia (UV) y Depaul University sostiene que un
pequeño cambio de formato en los textos puede ayudar a los
niños con dislexia a leer mejor, mejorando su velocidad de lectura y
comprensión. Concluye que todo lo que se necesita es un
pequeño --y prácticamente imperceptible-- aumento de la
cantidad de espacio entre las letras en el texto. Entra en este link y encontrarás el artículo.